La Explorer América viene con un motor de cuatro cilindros, dos litros con tecnología EcoBoost, que eroga nada menos que 275 HP. Eso no es todo: el V6 de 3,5 litros empuja 340 CV.
Con respecto a la Explorer actual, pesa unos 70 kilos menos, en gran parte porque el impulsor EcoBoost es más pequeño, liviano y eficaz. El V6 EcoBoost es entre un 20 y 30 por ciento más potente que el V6 de la Explorer convencional. Así funciona el EcoBoost.
Tiene transmisión automática de seis velocidades, que el conductor puede dejar en una marcha que él quiera seleccionar con sólo mover una perilla si es que el terreno lo justifica.
El diseño muestra una parrilla de dos barras (muy lejos del Kinectic Design de la marca en Europa), un capó con una cúpula en color gris más oscuro, elevada del resto. Las luces traseras son líneas que forman un triángulo y el techo es vidriado, con pilares gruesos que lo unen a la carrocería.
Adentro, tiene muchas soluciones inteligentes. Los asientos delanteros se apilan con sólo tocar un botón para permitir un mejor acceso a las plazas trasera. Además, posee una mesa de trabajo que con asientos que se despliegan del portón trasero. En la consola central se ubican el navegador satelital y la brújula, ambos tridimensionales.
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