Guerrieri, el argentino con todas las fichas

Esteban Guerrieri consiguió su primera victoria en la World Series en la última vuelta de la última carrera del año, que se corrió en Cataluña. A fin de año probará un Toro Rosso. El de Ramos Mejía es la esperanza nacional para la vuelta de un argentino a la Fórmula 1. No es imposible.

Guerrieri coronó con una victoria su mejor temporada en Europa. Si bien en 2003 fue campeón de la Fórmula Renault europea (denominada Master), la WS es un torneo muy importante, un escalón debajo de la GP2. [Cómo es un auto de la WS]

Junto con Augusto Scalbi, son los dos argentinos que aún se mantienen en Europa. Ricardo Risatti (probó un Toyota de F1 a fin de 2007) y Juan Cruz Alvarez (no pudo seguir en GP2 tras su paso en 2006), fueron los últimos jóvenes que tras dejar el alma en el viejo continente, debieron volver al país con la cabeza gacha.

Ni hablar de Pechito López, que en 2006 recorrió más de 15 mil kilómetros de pruebas con el Renault de F.1, equipo que ese año fue campeón.

Guerrieri corrió en 2004 la F3000 con el BCN que dirige el ingeniero argentino Enrique Scalabroni, quien lo halaga cada vez que puede. En el 2005 pasó por la GP2 y en 2006 por la Euroseries, sin grandes resultados.



En 2007 llegó a la F3 Británica, con el equipo novato Ultimate, con el que tuvo que desarrollar el chasis Mygale, que todos competían con Dallara.

Esta temporada, vino lo mejor. En un torneo súper competitivo como es el certamen internacional de la F3 Británica, alcanzó su mejor resultado en Monza, al terminar segundo (también fue lo máximo de la escudería). Ahí, el equipo Ultimate lo promovió a la World Series.

Si bien en un principio pensé que era otra vez volver a empezar, porque el Ultimate debutaba en la WS, no fue así. El equipo fue competitivo desde un principio. Es más, Fabio Carbone, su coequiper, ganó tres carreras y terminó 3º.



En sus seis carreras (arrancó en Silverstone, dos fechas después del inicio), Esteban fue dos veces cuarto y logró un podio antes de obtener la pole y la victoria en Barcelona. En medio pasaron excelentes carreras en lluvia, muy buenas clasificaciones y elogios de todos los integrantes del equipo.

En la segunda carrera de hoy, arrancó adelante y perdió la punta en los boxes. En la última vuelta James Walker dejó el hueco y el argentino no lo dudó. Así lo explicó:

"Fue realmente emocionante la manera en la que conseguí mi primera victoria en la WS. Desde el comienzo del fin de semana sabía que tenía el ritmo para triunfar. Aprovechamos la pole, pero enseguida me di cuenta que el piloto de atrás venía rápido. Peleamos como locos desde el principio hasta el final. De los boxes salí segundo, pero no me iba a rendir de ninguna manera. En la última vuelta vi la oportunidad y ¡fui por ella!"

A fin de año, probará un Fórmula 1 del equipo Toro Rosso. Por eso, es la gran esperanza nacional. Felicitaciones, Guerrieri.

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