AutomOndo recorre sus primeros kilómetros y, como un auto que recién sale del concesionario, está en ablande. Apenas salido al mundo, se sorprende por sus colores brillantes y fotos increíbles. Al igual que un bebé, deja su primer chiche y ahora busca la sorpresa en la pintura, los dibujos.
José María Villafuerte nació y vive en San Pedro, a la vuelta de la casa de Osvaldo Morresi. Estudió en Bellas Artes en La Plata y fue compañero de Rocambole, con quien mantiene una gran amistad. Amigo y admirador de Fangio, es uno de los pocos pintores en el mundo que cuenta historias de automovilismo con sus obras. Así puso primera:
-Empecé a pintar a los 15 años. Lo primero que hice fue en el cómic, en la revista D’Artagnan. A fines de los ’70, me tuve que exiliar en Brasil y cuando volví, fue con una mano atrás y otra adelante. La unión de mis dos pasiones, el automovilismo y la pintura, se dio por casualidad. En una exposición de autos, un amigo me pidió que haga unos trabajos para el stand de Juntas Clipper. Eran dibujos de autos de calle.
Juntas Clipper era una empresa muy ligada al automovilismo en esa época. Auspiciaba el avión de las transmisiones. Las obras que decoraban el estudio de Coche a la Vista (Canal 7, con la conducción de Raúl Barceló) hicieron el resto. Alfredo Parga lo animó a seguir. La casualidad siguió haciendo de las suyas…
-Juan Manuel Bordeu, al ver los cuadros de Fangio, me preguntó si lo conocía. Yo le dije que no. Bordeu me lo presentó y ahí arrancó la amistad con el Chueco. Fangio estaba comenzando a armar el museo y me encargó varias obras.
-¿Tiene alguna obra favorita?
-Cada obra es un desafío en sí misma. Uno parte de una historia para contar y el desafío es reflejarlo en una imagen. No tengo una obra en particular, pero las de TC son especiales. El Turismo Carretera es muy rico en historia y no hay ningún ámbito que la refleje. Yo con mis pinturas, trato de dejar constancia de la inmensa historia del TC.
-¿Cuál fue el mayor desafío que le tocó pintar?
-El de Morresi fue uno. Era mi vecino, lo conocía del pueblo. Si bien no era una relación fluida, nos conocíamos. Cuando el Pato perdió la vida, llevar a cabo esa obra fue un desafío.
-¿Qué significa Fangio en su vida?
-Estaba pintando a Fangio con la Alfetta, en Mónaco. El fondo no me gustaba, entonces empecé a taparlo con témperas. Las témperas, en varios colores y capas, producen un efecto borroso. Del dibujo, sólo quedaba Fangio y el auto. A los pocos días, el Chueco falleció. Entonces, volví a mirar el dibujo y parecía que Fangio estaba corriendo en el cielo. Así nació “Fangio, en busca del sexto título”. A partir de ahí, sentí como una responsabilidad por inmortalizar la historia de Fangio, de continuar su legado.
Villafuerte tiene una exposición permanente en San Pedro, donde exhibe más de 20 obras y varios elementos de TC, en homenaje a los 70 años de la categoría. Trofeos de Juan y Oscar Gálvez y el último buzo antiflama de Luis Di Palma son algunos ejemplos. Todos los que vayan a Autoperformance (del 28/11 al 2/12), podrán ver su stand. AutomOndo inaugura su sección “mOndo Arte” y agradece por su colaboración a José María Villafuerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario